Cangrejos al Sol (PARTICIPANTES)

CANGREJOS AL SOL es una iniciativa poética que nace con la intención de llevar la poesía a espacios abiertos. Se trata de un Perforecital en el que los autores interpretan sus poemas con conciencia escénica. En esta primera ocasión el lugar escogido es la Glorieta de la cantante Ofelia Nieto, trazada por el arquitecto Juan Talavera Heredia, e inaugurada el 30 de junio de 1935. El dibujo de esta composición es de Juan Miguel Sánchez, y la realización de la Fábrica de Nuestra Señora de la O de Triana. En una gran hornacina revestida de baldosas cerámicas, se representa a Ofelia Nieto acompañada por dos figuras que simbolizan el canto y la música. Pensamos que, entre estos dos símbolos, la poesía cerraría un atractivo círculo que simbolizaría el acto poético, o el significado de lo que se da en llamar Perfopoesía. En la portada de esta publicación encontramos al dios Védico AGNI, cuyos elementos son la tierra y el fuego. Es el dios de la sabiduría, y se representa como un hombre colorado, con dos cabezas (una benévola y otra maléfica), tres piernas y siete brazos, y con ojos, cejas y cabellos oscuros. Monta en un carnero; viste una poita (cordón brahmánico) y una guirnalda de frutas. Llamas de fuego surgen de su boca y siete rayos de gloria manan de su cuerpo. También representa el fuego del sol y de la luz de los corazones de quienes le adoran. Como personificación divina del fuego de los sacrificios, es la boca de los dioses, es el portador de ofrendas y el intermediario entre humanos y dioses. Protege a los hombres y a sus hogares. Queremos celebrar así el Día del Sol, realizando un recital de Perfopoesía en el cual actuarán 14 poetas andaluces, en un marco incomparable de luces y sombras.

RECITAL CANGREJOS AL SOL

Perforecital del Domingo, día 20 de Junio, a las 20 H.,
en conmemoración del día del Sol.
Será en el Parque de María Luisa de Sevilla, en la Glorieta de Ofelia Nieto.

Participarán:
Marga L. Morales
Carmen Gusanillo
Javier Gato
Victoria Moreno
Saray Pavón
Nuria Mezquita
Antonio G. Villarán
José Daniel García
Siracusa Bravo Guerrero (Indigesta)
Fernando Bazán (Vicio)
Marina Ramón Borja
Laura Rosal
Álvaro Castilla (La Bestia)

...y regalaremos el número 0 de nuestra nueva colección de Plaquettes, llamada PEQUEÑOS TESOROS DEL REINO DE TAIFAS, publicada por CANGREJO PISTOLERO EDICIONES.

A los que dicen y comentan...

Dicen que la Perfopoesía es como las búrbujas, que está vacía de contenido (sí, algunos aluden a los perfopoetas de forma tan negativa con símiles tan vagos como éste). Tal vez esas personas también piensen lo mismo del Surrealismo y de la pintura abstracta. Personas que no sienten. Sólo piensan.
Cuando se mira una obra de arte -del tipo que sea- lo más importante es que nos llegue dentro: una sensación, una emoción. No pensamientos.

Bajo mi humilde opinión, consumidora y creadora, la poesía es sólo POESÍA "cuando te llega al alma". No hablo de poesía académica, de rimas -fáciles o rebuscadas-sino del término místico y espiritual. POESÍA. Ésa, la que "no es una plumita "(A.G.V.), la que se ve en los lavabos de cualquier parte, incluso en una discoteca (¡válgame dios!) a los ojos de Javier Gato, la que sientes mirando el Guernika de Picasso, en un banco del parque, en la costa o subiendo el Kilimanjaro. POESÍA.

No me gusta la poesía anquilosada. No me gusta el miedo de los poetas a descubrirse y que anden encondiéndose detrás de complicadas metáforas. No me gustan los poemas que necesites cinco minutos para descifrarlos y desencriptarlos. Aún así, los respeto, aunque para mí, si el mensaje se detiene en la cabeza antes de llegar al corazón...ya no tiene sentido.

Por esto, y porque se puede jugar con todo lo que atrae y vincula al ser humano, como la música, la danza o la interpretación (que no teatro, que aquí no se hace La Casa de Bernarda Alba, a ver si sabemos de qué estamos hablando)...por esto, y por más, la POESÍA, ahora más que nunca, es PERFOPOESÍA.

Diacronía

-¡"Ni una más, santo Tomás"!-
...se repetía insistentemente, entrando en el coche. La noche se le antojaba cálida y fría a la vez. No recordaba haberse sentido tan sola nunca...
Encendió el motor de un golpe, sin esperar la señal del monitor, casi con violencia, hiriendo lo único que podía permitirse....y ni eso...
(-"Seguro que no se va a estropear por una vez"-)
...pensó, más malhumorada aún.
La radio saltó automáticamente con sus animados locutores, pluriempleados de radio y del marketing de Facebook. Tras ellos, música disco vacía de contenido. Alienada con la banda sonora que le había tocado, apagó la radio.
(-"Él no va a estar ahí de todas formas...
...¿cómo voy a aceptar que siempre estoy donde debo estar si parece que me equivoco en cada paso?"-)
La opción de pasar la tarde estudiando en la biblioteca no era nada atrayente comparada con la invitación de salir de la ciudad con los amigos. Jerez. Todo el mundo quiere ir a Jerez. La presentación del libro de su amiga (con su respectiva celebración). El Primark londinense esperando allí con su gran gama de ropa de los más cool a low cost. La estudiante jerezana que vuelve a casa para descansar el fin de semana...Todo el mundo quería ir a Jerez. Todas las pistas apuntaban allí, a ese lugar, a esa tierra por hoy prometida.
Pero no.
Hoy, con un acopio de responsabilidad había optado por dirigirse a la biblioteca, a pesar de ser viernes e ignorando las señales...
Al pasar por un control de alcoholemia frunció el ceño aunque ni siquiera se había percatado de la presencia policial. No era la justicia quien la perturbaba hoy.
Era él...
Esa criatura pura y cambiante, tan madura e infantil que engancha sin más. La mezcla perfecta. Lo odiaba y lo amaba, y el reconocerlo la enfurecía más aún. Tan perfecto que se permitía el lujo de ignorarla. Le daba donde más le dolía. Indiferencia total. Un cordial saludo y cero. Cero odio. Cero amor. Cero.
¿Por qué iba a sorprenderse si llevaba más de dos años haciendo lo mismo? Sin desaparecer nunca del todo, pero haciendo gala de esa indiferencia. Y con la virtud de aparecer justo cuando necesitaba estar más concentrada. No paraba de rememorar en su mente ese momento cuando entró en la sala de estudio, revisó las mesas rápidamente en busca de algún asiento libre...y ahí estaba él. Marmóreo, impasible, perfecto -quizá algo más ancho, los años no perdonan-.
Done is done. Si eso es así, si estaba ya todo perdido, ¿por qué la vida se lo ponía insistententemente en medio?
Se devanaba los sesos buscándole el sentido a tanta paradoja cuando reparó en que ya había llegado a casa. A esa casa donde la soledad no está penalizada ni duele. Donde él seguía estando presente, sin rencor, en esos ardientes recuerdos donde él, una y otra vez la había amado, besado, tocado, sin pausa, durante algo más de dos años...